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| Negro futuro para la Amazonía |
Entre
12% y 21% disminuirán las lluvias en la
Amazonía en razón a que los bosques están siendo sustituidos por cultivos, lo
que provoca que la humedad esté aminorando y, a su vez, reduciéndose las precipitaciones.
Los
expertos temen que estos cambios perjudiquen al sector agrícola, que genera 15
mil millones de dólares anuales en la Amazonía, así como a la industria
hidroeléctrica, que proporciona el 65% de la electricidad de Brasil.
Cada
año se deforestan 50 mil kilómetros cuadrados de selvas entre los trópicos,
aproximadamente la misma superficie de Inglaterra.
La
vegetación desprende humedad desde la tierra hacia la atmósfera en un proceso
conocido como evapotranspiración, que influye en la cantidad de lluvia.
Cuando
los bosques son sustituidos por pastos o cultivos, la humedad del suelo
disminuye, lo que reduce a su vez la humedad atmosférica y las precipitaciones.
