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Arsénico de la minería contamina aguas de Guatemala. |
Muy
a pesar que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ordenó la
suspensión de las actividades mineras en la Mina Marlin, que realiza
operaciones en San Miguel Ixtahuacán y Sipacapa, el Ministerio de Energía y
Minas de Guatemala ha dictado una Resolución en la que establece que “…no
existe causal para suspender operaciones de Marlin”.
Montana
Exploradora es la
razón social de la empresa que realiza actividades en la Mina Marlin la misma que
hizo valer sus derechos ante la Comisión Interamericana, pero que no acata la
resolución de ésta amparada en la decisión del Ministerio guatemalteco.
Fue
luego de varios meses, luego de emitido el fallo de la CIDH, que el gobierno de
Guatemala impulsó una serie de “investigaciones” y “análisis” a cargo de los
ministerios competentes, para luego también instalar la Mesa de Diálogo, que sirvió
muy bien a los intereses de la empresa porque de inmediato se emitió el
dictamen del Ministerio de Energía y Minas, que acogió de forma oficial, lo que
la compañía sostenía: “La Mina Marlin y todos los colaboradores de Goldcorp en
Guatemala operamos a todo nivel acorde a los más altos estándares nacionales e internacionales”.
Pero,
también la Organización de Estados Americanos (OEA)
dispuso descontaminar las fuentes de agua de las comunidades afectadas,
asegurar el acceso al líquido vital para consumo humano e implementar medidas
efectivas para prevenir la contaminación ambiental.
A
pesar que las medidas son vinculantes, y por tanto de obligado cumplimiento, el
gobierno guatemalteco se niega a acatar las resoluciones, y sigue protegiendo
descaradamente a la empresa minera.